Este año quedarán abiertos cinco procesos de contratación de carreteras.
Luego de que el Gobierno definió los 12 proyectos de infraestructura que harán parte de la primera ola de concesiones de quinta generación (5G), por un monto de 17,8 billones de pesos, de un programa total estimado en 48,29 billones de pesos, y tras los efectos de la pandemia, ya comenzó el cronograma de licitación.
La Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) estima que este año quedarán abiertas las licitaciones de cinco proyectos, todos ellos de infraestructura vial, que serán adjudicados en los primeros meses del 2021, y comenzando el nuevo año se publicarán los pliegos de dos proyectos fluviales (río Magdalena y canal del Dique) y de tres iniciativas aeroportuarias.
La primera de ellas, que es el proyecto Accesos Cali-Palmira y cuyos pliegos definitivos fueron publicados a comienzos de septiembre, contempla 310 kilómetros de malla vial que serán intervenidos con obras como la construcción de calzadas sencillas, mejoramiento del corredor existente, intercambiadores y puentes vehiculares y peatonales, entre otros, con inversiones de capital por 1,16 billones de pesos.
A este proyecto se le unirán, entre noviembre y diciembre, la Iniciativa Privada (IP) ALO Sur, trayecto de 23,5 kilómetros que conectará la calle 13, a la altura de Fontibón, en Bogotá, con la concesión Tercer Carril Bogotá-Girardot, cerca del peaje de Chusacá, de los cuales 19 kilómetros serán de una nueva vía, con inversiones por 660.000 millones.
El director de la ANI, Manuel Gutiérrez, le explicó a EL TIEMPO que en este proceso ya se entró en las últimas etapas de aprobación por parte del Ministerio de Hacienda, para luego pasar al Departamento Nacional de Planeación y luego abrir el proceso de manifestación de interés.
Si hay un interesado, se hará una selección abreviada, como lo permite la ley 1508, de iniciativas privadas, cuando estas no requieren recursos públicos. El proyecto, en el que participa el empresario Mario Huertas con las firmas Pavimentos Colombia, Coherpa y Concay, con 25 por ciento cada una, contempla un nuevo peaje antes de salir del perímetro de Bogotá y es clave para mejorar la movilidad en el acceso occidental a la capital.
Los proyectos 5G son iniciativas multimodales de asociaciones público-privadas, estructuradas y ejecutadas sobre bases de sostenibilidad institucional, financiera, social y ambiental.
Según la ANI, así logran mayor aceptación social, al ser pensados desde la realidad socioeconómica de las comunidades, hay una mejor incorporación de las condiciones medioambientales, mayor impacto económico en los territorios y en la productividad del país, e incentivos para utilizar una financiación sostenible.
Igualmente, en el norte de Bogotá y el municipio de Sopó saldrá a licitación el proyecto Accesos Norte Fase 2, para ampliar a cinco carriles la autopista Norte entre las calles 192 y 245 (5,83 kilómetros) en ambos sentidos, la construcción de una segunda calzada en la carrera 7.ª entre las calles 200 y 245, así como la construcción y mejoramiento de 7,2 kilómetros en la perimetral del municipio de Sopó, con inversión de capital de 1,27 billones de pesos.
“Hemos sentido mucho apetito y hay interés grande del mercado. Hemos hecho seminarios, foros y el interés es muy alto”, agrega el funcionario.
Reemplazo de Ruta del Sol 2
El Gobierno le apunta también este año a dejar abierta la licitación de los dos trayectos que conforman la troncal del Magdalena (Puerto Salgar-Barrancabermeja y Barrancabermeja-San Roque), que reemplazan la concesión de la Ruta del Sol 2.
“En la primera parte ya radicamos la estructuración hace un mes y la segunda parte está prevista radicarla para iniciar el proceso. Acá ya terminó estructuración”, indicó.
Estos dos tramos contarán con inversiones por 3,59 billones de pesos, y tienen una extensión de 259,1 kilómetros y 272,1 kilómetros, respectivamente.
Los proyectos viales de la primera ola los completa el corredor formado por los tramos Buga-Loboguerrero y Loboguerrero- Buenaventura, pero la licitación solo se abrirá hasta 2021 debido a que queda pendiente adelantar dos consultas previas, de un total de seis. Se prevé que la estructuración quede lista en noviembre.
En el tema férreo, la apuesta es la concesión entre La Dorada, Caldas, y Chiriguaná, Cesar, para transporte de carga, cuya estructuración se cerrará en diciembre y que saldrá en paralelo con los dos proyectos fluviales (río Magdalena y canal del Dique) en el primer trimestre de 2021.
El proyecto, de 521 kilómetros, requerirá recursos de capital por 1,8 billones de pesos.
Entre tanto, para la APP del río Magdalena y del canal del Dique ya se abrió la precalificación.
Para la primera se realiza la validación de la estructuración técnica y se hacen mejoras sugeridas por la banca multilateral, con la meta de abrir licitación en el primer trimestre de 2021 para adjudicar el contrato. En el segundo hay una ruta técnica diferente:
“Tenemos que hacer 14 consultas previas, por una enorme cantidad de comunidades ubicadas a lo largo de los 117 kilómetros del canal. Ya empezamos a trabajar y se prevé que a final de año estén listas y se abrirá la licitación en simultánea con la APP del río Magdalena”, explicó el presidente de la ANI.
Segunda ola, por $ 30,2 billones
En el plan de la Agencia Nacional de Infraestructura, la segunda ola de concesiones de quinta generación contempla a la fecha 10 trayectos cuyas inversiones de capital sumarían 20,9 billones de pesos, de los cuales tres son iniciativas privadas que no requerirán recursos públicos.
Se trata del proyecto Santuario-Caño Alegre y la terminación de la Ruta del Sol 1, en Cundinamarca, únicos tramos para completar doble calzada entre Bogotá y Medellín. Estos dos tendrían un costo de 4,4 billones de pesos. El proyecto que completa el programa es la iniciativa privada del Sistema Aeroportuario de Bogotá.
En el plano vial, esta ola incluye la vía Zipaquirá, Cundinamarca-Barbosa, Santander, y la carretera Barbosa-Bucaramanga, que representarían inversiones de 3,2 billones de pesos y 2,9 billones de pesos, respectivamente.
De esta segunda ola, la meta del Gobierno es dejar adjudicadas, antes de agosto de 2022, la conclusión de la Ruta del Sol 1 y la vía entre Pasto y Popayán, que es el proyecto que más recursos necesitaría, por 4,5 billones de pesos.
El plan cubre 4 aeropuertos
En la primera ola de las concesiones 5G, la ANI ya finalizó la estructuración de la iniciativa privada para la ampliación del aeropuerto de Cartagena y está pendiente del visto bueno del Ministerio de Hacienda y Planeación Nacional. Las inversiones sumarán 470.000 millones de pesos.
Y en fase de factibilidad, en evaluación, están las iniciativas privadas Aeropuertos de Suroccidente (tres terminales en Neiva, Cali y Buenaventura, con inversiones por 1,8 billones) y el nuevo aeropuerto de Cartagena, en el sector de Bayunca, con un costo estimado de 2,9 billones de pesos.
Pero el mayor proyecto, todavía distante y que está en la segunda ola, es el Sistema Aeroportuario de Bogotá 2050, iniciativa privada que no requerirá recursos públicos y cuyo costo sería de 9,4 billones de pesos.
El Gobierno le apunta también este año a dejar abierta la licitación de los dos trayectos que conforman la troncal del Magdalena
¿Qué ajustes traerán los nuevos contratos de infraestructura de 5G?
Para financiación, el nuevo contrato está mucho más a favor del interés del Estado, pero manteniendo un balance para que la licitación sea más atractiva.
Hay cambios en la terminación anticipada de los contratos, por ejemplo, pero son ajustes que realmente de cara a la financiación son favorables y van a mantener lo que los privados aportaron tanto en equity (capital) y en una proporción justa para el Estado para que no pague más de lo necesario.
Otros cambios importantes son que tiene en cuenta los temas sociales, involucrando un porcentaje para inversión social, y esto es positivo de cara a los financiadores porque cuando no estaba, se paralizaban las obras porque afectaba el retorno de flujos al financiador.
¿Qué proyectos dejarán licitados de la segunda ola?
De la segunda ola, en este gobierno se quiere dejar adjudicada la conclusión de la Ruta del Sol 1 y la vía entre Pasto y Popayán.
Este programa es de casi 50 billones y la idea es que sea una política de Estado para seguir con el avance de infraestructura.
En los siguientes meses y años se van a entregar y se va a ver cómo cambia la infraestructura del país. Esperamos que se continúe con el esfuerzo y que sea a una década. Los proyectos están construidos sobre la base del Plan Maestro de Infraestructura de Transporte, realizado con Fedesarrollo por el gobierno de turno.
¿Qué análisis le han hecho a la iniciativa Ferropista para un túnel ferroviario en La Línea?
Es un proyecto que tiene muchas preguntas que no han sido respondidas aún por los originadores.
Es una inversión enorme y falta mucho para su madurez y para que sea una realidad. No hacemos anuncios porque le falta madurar bastante los estudios técnicos. Es un túnel férreo con complicaciones en la cordillera Central, que no es un tema tan simple.
¿En qué va el plan maestro férreo?
Lo está trabajando el Ministerio de Transporte. Es un plan a la siguiente década que básicamente es recuperación de corredores y mejorar condiciones de competitividad.
¿Y qué se prevé para el caducado ferrocarril del Pacífico?
Vamos a avanzar este año en la estructuración técnica, jurídica y financiera. Hubo muchos fracasos por diversas razones. Viene un rediseño del proyecto.
ÓMAR G. AHUMADA ROJAS
Tomado de El Tiempo