Camilo Sánchez, presidente de Andesco
Tomado de Portafolio
Hemos avanzado decididamente en coberturas de acueducto y alcantarillado gracias a la Ley 142, quedando una tarea por consolidar en el tratamiento de las aguas residuales con enfoque de economía circular. La meta trazada al 2030 es tener el 68,6% de las aguas residuales municipales tratadas, 80% en 2050, y promover su reúso y el aprovechamiento de subproductos como biosólidos y biogás.
Para lograrlo, requeriremos inversiones al 2030 de más de 5.000 millones de dólares. Se han priorizado 58 municipios con poblaciones mayores a 100 mil habitantes, responsables del 73% de las aguas residuales municipales del país distribuidos en 25 departamentos. Tratar las aguas de Bogotá corresponde a dos terceras partes de la meta. Por lo tanto, es el pareto para cumplir con los objetivos trazados nacionalmente.
De ahí la importancia de culminar el proyecto de la Planta de Tratamiento (PTAR) Canoas, la cual encuentra detenida su estructuración por diferencias entre el Distrito y el Gobierno Nacional; llegó el momento del diálogo técnico real y constructivo para no castigar a todo el país por una disputa política e ideológica.
Con la PTAR Canoas se reducirá la carga de contaminación orgánica e inorgánica en la cuenca media del río Bogotá, mejorando la calidad de vida de la población residente en las áreas aferentes al río, como su salud, por la disminución de la posibilidad de enfermedades asociadas a los malos olores, y mejora de los entornos.
El efecto también lo tendrían los habitantes de las riberas del río Magdalena y los 80 municipios que se abastecen de este afluente, quienes deberán igualmente seguir realizando sus procesos de descontaminación para no malograr lo avanzado.
La PTAR Canoas está lista, ya tiene los estudios y diseños de detalle, cuenta con la aprobación del cupo de endeudamiento por parte del Concejo de Bogotá, y aval del Banco Mundial, con licencia ambiental aprobada y la construcción de la Estación Elevadora Canoas, que entrará en pruebas durante el segundo semestre de este año.
Además, el pasado primero de abril se cerró la etapa de precalificación de oferentes interesados en participar en la licitación para la construcción y puesta en funcionamiento de la PTAR Canoas. Sólo falta que el Ministerio de Hacienda y Crédito Público otorgue la garantía soberana de la nación para recibir el financiamiento de la banca multilateral.
Es momento de tomar decisiones para generar resultados, sin importar quién empezó la obra sino continuar para aplaudir igualmente a quien la termina, sin egos pero con efectividad, primando el interés general al devolver la vida a la arteria fluvial central del país, construyendo sobre lo construido.
Por los hechos los conoceréis más que por las palabras.