“Esta nueva empresa tiene comprometidos más de US$700 millones para inversión”

La nueva firma solucionará algunos desencuentros que tenían las compañías por años frente a su sociedad y los dividendos ganados, por lo que se espera que, una vez tenga el visto bueno de los accionistas, y luego del Concejo, Enel Bogotá sea un vehículo robusto, con un patrimonio de US$10.000 millones y genere eficiencias y ganancias al GEB y al Distrito.

Además, se prevé que sea un jugador clave en la generación de energías renovables en el país y en otros mercados como el de Centroamérica.

¿Hace cuánto vienen trabajando en el acuerdo y cómo llegan a él?
Llevamos un año trabajando en este acuerdo que presentamos. Teníamos un conflicto con respecto a temas complicados, aspectos reales como la repartición de dividendos. Era una pelea complicada que surge también porque no todos están entendiendo la profundidad del cambio que estamos viviendo. La problemática del calentamiento global va a generar una revolución tecnológica. En el proceso caímos en cuenta de que si no hacíamos algo ya, TGI y Emgesa se iban a marchitar, como les ha pasado a los que no se han dado cuenta a tiempo de que el mundo está cambiando. Empezamos a traer gente que era experta en este cambio y con nuestro socio Enel empezamos a buscar cómo trabajar en conjunto en vez de pelear para dar ese paso. Eso es lo que le vamos a presentar a la Asamblea.

¿Qué va a pasar en cuanto a inversión?
Vamos a invertir mucho. La forma de que esto no muera es avanzar. Con esto, la empresa va a crecer un 25% y tiene unos compromisos por más de US$700 millones en inversión y que es parte de la alianza. Si uno no tiene energía competitiva va a estar por fuera del futuro. Tendremos unos 1.800 MW de potencia que van a estar disponibles y es complementario al gas. Porque la energía renovable depende de factores climáticos y cuando no estén disponibles se va a necesitar llenar ese vacío y será con gas; más adelante con una mezcla de gas e hidrógeno, y por último con hidrógeno. Entonces, Enel se vuelve clave para complementar eso que se quiere hacer. Así se obtiene una empresa que tiene una estrategia para mejorar vidas a través de energía competitiva.

La inversión que nombraba anteriormente ¿en qué aspectos sería?
Principalmente, en renovables no convencionales. Vamos a participar fuertemente en el sector de generación de energía verde, que está en el plan estratégico de Enel y en el nuestro.

¿Siguen interesados en la Regasificadora del Pacífico?
Claramente. Pensamos que el gas es indispensable porque sin este toda la estrategia de energías renovables no convencionales no es sostenible.

Con respecto a la participación que será menor en esta nueva empresa, ¿por qué decidieron que fuera así?
Es difícil de transmitir al público qué es participar. Para nosotros participar es hacer ejercicios de señor y dueño. En esta relación de Enel y GEB el dueño y señor claramente es Enel, que dijo voy a hacer una empresa que se dedique a energías renovables aparte, que era Green Power. Es inequívoco que esa empresa es de ellos, pero hay personas que en aras de desinformar están diciendo lo contrario. Hay una confusión porque en 1996, que era una época compleja, era difícil privatizar una empresa. En ese momento se decidió que Bogotá tendría 51% de participación en el grupo, eso da la sensación de ser dueño, pero sólo 42% de esa participación tiene derecho a voto y el restante son acciones preferenciales. Pero en una sociedad más grande vamos a tener 42,5%; es decir, el mismo nivel derecho a voto. No hay ningún cambio relevante.

Relacionado con eso este negocio, ¿qué pueden esperar los accionistas?
Vamos a entregar más dividendos, que es para lo que uno mejora una empresa. Esperamos lograr entre $30.000 y $40.000 millones en más dividendos de ahora en adelante. Más $1 billón que nos van a dar, de lo que tenían retenido.

¿Qué beneficios e impactos va a tener este acuerdo?
Tendremos en la ciudad de Bogotá alumbrado público inteligente, por ejemplo. Sobre todo le damos solución a una pelea que venía desde hace muchos años. También está crear esta Alianza con Ufinet para obtener la fibra óptica y que permitirá tener medidores inteligentes y alumbrado inteligente que puede complementarse con mecanismos de movilidad para control de tráfico. Asimismo va haber un sistema de medición de calidad de aire en tiempo real en Bogotá. Codensa también va a ser un jugador muy importante con el tema de la movilidad sostenible que es una apuesta muy importante para la ciudad ya que se va a necesitar 400 MW de potencia para poder mover el metro eléctrico.

Algunos concejales habían dado luces de desacuerdo con respecto al posible acuerdo, ¿les preocupa lo que puede pasar en el Concejo?
Tuvimos un problema de desinformación. Nosotros no estamos vendiendo, ni estamos comprando, tampoco estamos perdiendo el control. Estamos cambiando acciones preferenciales que valen muy poco para tener ordinarias. Me siento muy tranquilo, porque no estamos perdiendo nada y estamos mejorando la situación de la empresa de una forma interesante. Una vez se conozcan las bondades y beneficios del acuerdo vamos a tener más apoyo. No es una enajenación, entonces ellos no tienen que aprobar nada, solo estamos organizando activos.

¿La nueva empresa se llamaría Enel Colombia?
La empresa va a ser Enel Colombia SAS en Cámara de Comercio, pero va a operar como Enel Bogotá en toda la zona de influencia de Bogotá.

¿Van a tener participación en todos los proyectos renovables no convencionales en los que está Enel?
Ese fue parte del conflicto y nosotros exigimos exclusividad en los proyectos. De aquí en adelante van a desarrollar proyectos siempre en conjunto con nosotros, no solo en Colombia, sino en Venezuela, y Centroamérica. En todos somos socios y ellos serán dueños de 57,3% y juntos vamos a crecer en una estrategia que creemos que es buena para todos.

¿En los otros países va a tener impacto esta reorganización?
No, la operación para continuar en la misma medida.

¿Esta nueva empresa tiene contemplado participar en la subasta de energía que se va a llevar a cabo este año?
Sin lugar a dudas. No puedo adelantar con qué proyectos, porque Enel es la empresa controlante y nosotros somos los invitados.

¿Con respecto al proyecto de la subasta 2019, la Línea Colectora, en qué va va su avance?
Estamos trabajando duro, pero la situación es complicada. Nos preocupa mucho la situación de La Guajira. Hay muy poca armonía social. Hay conflictos muy fuertes entre la misma población y es difícil lograr acuerdos cuando la gente está viviendo circunstancias tan fuertes como la migración venezolana.

¿Cuánto calculan que se podría retrasar la entrega de este proyecto?
Estamos cumpliendo nuestro trabajo de apoyar la estrategia del gobierno y estamos haciendo todo lo que está en nuestras manos para lograrlo. El gobierno sabe de las dificultades que estamos enfrentando y en repetidas ocasiones nos hemos reunido con las autoridades y pedido citas con el ministro de Interior buscando su apoyo y haremos lo mismo hasta que logremos avanzar con el proyecto.

¿El acuerdo tiene contemplados planes de expansión?
Efectivamente, pero no los puedo comunicar porque Enel es el controlante.

Tomado de La República