Directivos de la empresa Electricaribe dicen que solo están haciendo mantenimientos en los circuitos que están presentando fallas.
Luego de la entrada en vigencia de la media de aislamiento decretada por el Gobierno Nacional, el comportamiento de la curva de demanda de energía de la Costa Caribe ha variado.
De acuerdo con los estimativos iniciales de la compañía que presta el servicio de energía en los siete departamentos de la Costa, en términos generales el consumo ha disminuido en los últimos diez días como consecuencia de la cuarentena. Sin embargo, dicha disminución corresponde al bajo consumo registrado en el sector industrial y comercial, el cual alcanza hasta un 40%.
“El consumo general ha disminuido, porque tenemos un grupo importante de empresas que no están en funcionamiento y ha hecho que el consumo en la Costa Caribe solo crezca en un 6%. Antes de la crisis el aumento en el consumo había sido del 12%. La costa registra un bajón en el crecimiento de la energía. Cuando ya llevamos eso a niveles de Electricaribe, encontramos que en las zonas donde están ubicadas grandes empresas, grandes industrias, donde el mayor volumen es comercio se observa una disminución del consumo, en algunas de hasta un 40%”, explicó Andrea Martínez Polo, gerente Comercial de Electricaribe.
Este panorama contrasta con el sector residencial donde el consumo ha crecido hasta un 15%, como consecuencia de la permanencia de todos los miembros de la familia en casa por la cuarentena.
En ese sentido, Martínez Polo hace un llamado a los usuarios para tener un consumo responsable, teniendo en cuenta que este alto consumo se verá reflejado en la facturación correspondiente al mes de abril. Según los primeros cálculos, la facturación estaría subiendo hasta en un 40%, dependiendo lo que se gasten en kilovatios lo usuarios.
¿Por qué las fallas en el servicio?. Por otro lado, Ramiro Castilla Andrade, gerente de Electricaribe Atlántico Norte, se refirió a las quejas por los daños en diferentes sectores de Barranquilla y de algunos municipios del Atlántico.
El directivo explicó que por la medida del Gobierno de enviar a los ciudadanos a su casa y por seguridad de los trabajadores fue necesaria la suspensión de los trabajos de mantenimiento preventivo que se venían desarrollando.
Esta situación, sumado al deterioro de las redes eléctricas por la falta de inversión desde hace más de 10 años, provocan las fallas y, por consiguiente, la suspensión del servicio de energía.
De acuerdo con Castilla Andrade, a este panorama hay que agregar que algunos usuarios hacen reportes falsos a la línea 115 cuando registran un “bajón de luz”. Por ejemplo, cuando informan que se cayeron las líneas o se incendia un poste la empresa determina desenergizar el circuito, por la gravedad de la situación, lo que implica afectar unos 15 barrios; sin embargo, al llegar al lugar de los hechos los operarios observan que la falla es menor y que solo se debía quitar la energía en una zona pequeña para reparar el daño.
El gerente aseguró que el tiempo que demoran en reparar la falla, desde que se recibe la queja en el 115, es de tres a cuatro horas, dependiendo de la complejidad del daño.
Para estos trabajos se tienen dispuestas 80 brigadas, las cuales tendrán el apoyo de Alumbrado Público mientras dure la crisis por el coronavirus.
Tomado de El Heraldo