Recientemente Claro lanzó su servicio share, además en 2017 Tigo vendió 1.200 torres a ATC y Movistar creo una compañía para gestionarlas
La infraestructura es uno de los factores claves para la reducción de la brecha de conectividad en el país. Sin embargo, este es un rubro que puede generan más costos para las compañías. Por ello, Claro lanzó reciente su servicio Share, con el que puso a disposición sus más de 8.500 torres a otras compañías del sector de telecomunicaciones, integradores, gobierno y autoridades locales, así como a empresas de explotación minera y energética, para que las arrienden y puedan poner sus antenas.
Con esta infraestructura, el operador cubre 1.119 municipios en 32 departamentos, y cuenta con 348.000 kilómetros de fibra óptica. “Con el arrendamiento de las torres se distribuye el costo, y eso nos hace más eficientes a todos, además, promueve que haya inversión y competencia en todo el país”, afirmaron voceros de Claro.
Natalia Guerra, directora de Asuntos Públicos y Regulatorios, Telefónica Colombia, opina de manera similar a los vocero de Claro, ya que afirmó que “los esquemas de compartición de redes e infraestructura ayudan a generar eficiencias, reducir tiempos y costos de despliegue, y disminuir la brecha digital”.
Cabe resaltar que esta ha sido una tendencia que se viene desarrollando desde hace tiempo entre los operadores móviles, ya que todos tratan de sacarle el mayor provecho a las torres de comunicaciones, bien sea arrendando o vendiendo.
Ese fue el caso de Tigo, que en 2017 vendió 1.200 torres de telecomunicaciones a American Tower Colombia, que actualmente ofrece más de 3.500 torres inalámbricas que permiten mejorar la cobertura y capacidad de la red, y realizó un acuerdo a largo plazo con la compañía para arrendarle la infraestructura. Ese mismo año, la filial de Millicom en también Paraguay vendió 1.400 torres a American Tower por US$123,7 millones.
Un año antes, Telefónica creó Telxius, con el fin gestionar las infraestructuras del grupo a nivel global. En 2019, se creó Telefónica Infra para concentrar sus participaciones en el sector de la infraestructura de telecomunicaciones. Esta compañía tiene un modelo híbrido, y de acuerdo con Guerra, es clave para que la empresa de telecomunicaciones pueda competir en un mercado que acusa de “afectado por la dominancia”.
Precisamente frente a ese foco que el arrendamiento de torres pone en la posibilidad de competencia, Juan Carlos Archila, presidente de América Móvil Colombia, indicó que “con la infraestructura de Claro disponible ya no hay disculpas para no invertir y competir por la preferencia de los usuarios”.
Frente a estas posibilidades que abre Claro con el arrendamiento, cabe resaltar que, según cifras de la Comisión de Regulación de las Comunicaciones, CRC, Claro tiene una cobertura de tecnología 4G en 1.062 cabeceras municipales; seguido por Telefónica Movistar, con 441 cabeceras; Tigo, con 329; y Avantel con 76.
En la competencia en este mercado todavía está por ver el efecto que tendrá la entrada de Partners, que tras la compra de Avantel actualmente se encuentra centrado en el desarrollo de la marca que lanzarán el próximo año, además de la infraestructura para cubrir los 8.000 sitios con los que se comprometieron durante la subasta del espectro.
Laura Neira Marciales
Tomado de La República