El Grupo EPM amplía y moderniza su infraestructura de transmisión y distribución de energía en las áreas donde desarrolla sus operaciones en Antioquia, el Eje Cafetero y Chile, con lo que busca no solo garantizar la distribución del servicio, sino además brindarle mayor seguridad y confiabilidad al sistema.
(Lea: Buenas cifras de Empresas Públicas de Medellín)
Las tareas consistieron en la reposición y modernización de equipos en 10 de sus subestaciones en Antioquia. Con la instalación de nuevas infraestructuras en la subestación Esmeralda de 230 kilovoltios (Kw), de la filial CHEC en Chinchiná (Caldas), se garantizará el suministro confiable de energía no solo para este departamento, sino también para Quindío y Risaralda, y se brindará mayor estabilidad, seguridad y confiabilidad al sistema de transmisión regional de la citada operadoras.
Así mismo, se realizó a través de su filial EPM Transmisión Chile S.A. la ampliación de la subestación La Cebada del parque eólico Los Cururos, ubicada en la comuna de Ovalle, región de Coquimbo, y que conecta este proyecto con las líneas de transmisión del sistema interconectado en el país austral, que hacen parte del Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
“La mayoría de estos proyectos se entregó en operación antes de la fecha aprobada, algunos de ellos con un costo inferior al presupuestado, y que su ejecución se realizó cumpliendo con los compromisos ambientales y legales establecidos por las diferentes autoridades”, señaló el gerente General de EPM, Jorge Londoño De la Cuesta.
El funcionario explicó además que está lista la nueva subestación Ituango a 500 Kw, construida con la tecnología “más moderna para permitir la conexión de la futura central hidroeléctrica al Sistema Interconectado Nacional (SIN), una vez esté lista para entrar en operación”.
Estos proyectos demandaron una inversión de $132.291 millones y permitieron generar 584 empleos temporales durante su ejecución.
En el departamento de Antioquia se destaca la ampliación en la capacidad de transformación de energía en la subestación Arboletes en Urabá; la ampliación e instalación de nuevos equipos en la subestación Caucasia; la puesta en servicio de la segunda etapa de la nueva subestación Calizas en el Oriente; la construcción de nuevas bahías para conectar proyectos productivos en las subestaciones Chorodó en el Occidente y en la subestación Rionegro en el Oriente, y la conexión del Túnel de Oriente a la subestación Miraflores.
Tomado de: Portafolio