Entre enero y junio, los usuarios pagaron más de $ 431.000 millones por las llamadas restricciones.
Cuando las redes de energía tienen restricciones para distribuir la electricidad generada, ese costo de más es cobrado a todos los usuarios del país a través de las facturas. Foto: Cortesía Electricaribe
Luego de que el año pasado se dispararan los sobrecostos a los usuarios de electricidad por la indisponibilidad de redes para transportar la energía producida por las centrales de generación (en total los consumidores pagaron 1,8 billones de pesos, según el Ministerio de Minas y Energía), este año su monto comenzó a caer de forma importante.
Según cifras de esta cartera, entre enero y junio el rubro de restricciones, que se detalla en la factura de todos los usuarios, alcanzó los 431.825 millones de pesos, suma que si bien no deja de preocupar, en todo caso, es menor en un 47 por ciento a la observada para el mismo período del año pasado.
En efecto, en el primer semestre del 2018, los consumidores debieron asumir más de 821.000 millones de pesos como consecuencia de la incapacidad de las redes, básicamente las de tipo regional con foco en la costa Caribe.
En el 2018, según las cifras del Ministerio, esa ineficiencia costó 1,8 billones, de los cuales 978.000 millones se originaron en el segundo semestre.
De acuerdo con la ministra de Minas y Energía, María Fernanda Suárez, además del plan de seguimiento que se estructuró buscando bajar estos mayores costos, a medida que vayan entrando diferentes proyectos de generación y autogeneración de energía, se irá aliviando el tema de las restricciones, en particular en la costa Caribe.
“Hicimos todo un plan, con la Superintendencia de Servicios Públicos, XM, la Creg y la Upme, para mejorar el tema de las restricciones, y tenemos los resultados”, señaló la funcionaria al destacar que también han entrado varias líneas del sistema de transmisión regional, que contribuyen a este objetivo.
Y es que el año pasado las restricciones llegaron a los 35 pesos por kilovatio, y ahora están en una cifra cercana a los 20 pesos por kilovatio, aproximadamente.
Es decir que, en total, lo que se logrado reducir es 15 pesos por kilovatio, que son 3,5 veces la contribución de 4 pesos por kilovatio que se determinó que deben pagar los estratos 4, 5 y 6 para financiar parte del salvamento de Electricaribe.
Las que más sienten el beneficio de esta situación en sus cuentas, por la baja en las tarifas, son las empresas intensivas en uso de energía como Cerro Matoso, Ecopetrol, Corona y grandes industrias, lo que se refleja en sus facturas de forma inmediata.
ÓMAR G. AHUMADA ROJAS
Subeditor de Economía y Negocios
En Twitter: @omarahu
Tomado de El Tiempo