Camilo Sánchez, Presidente de Andesco
Tomado de Portafolio
Encontrar con vida a los cuatro niños indígenas perdidos después de sufrir un accidente aéreo en el Guaviare, ha sido la mejor noticia recibida en meses. La Operación Esperanza, con trabajo mancomunado de las Fuerzas Militares, organizaciones indígenas, instituciones oficiales y las oraciones de los colombianos imponen una seria reflexión: cuando nos despojamos de rivalidades, dejamos de descalificar al adversario por pensar distinto, o de graduar a los medios de comunicación de enemigo por informar lo que realmente sucede, los resultados se potencializan.
Debemos cambiar la manera como nos estamos relacionando, al igual que el tonito de los discursos, no más amenazas, injurias y mucho menos seguir generando odios de clases, y así disminuirá la zozobra reinante, permitiéndonos tomar un respiro, para bien del gobierno, gobernados, instituciones y ciudadanía. Siempre es mejor el diálogo propositivo para generar tranquilidad, construyendo sobre lo construido, reconociendo lo hecho por los gobiernos anteriores y así terminar la absurda polarización que nos tiene paralizados y peor aún, decreciendo.
Del dicho al hecho hay mucho trecho; hace casi un año, anunció el presidente que asumiría las funciones regulatorias para intervenir tarifas, la bolsa de energía y la decisión de bajar el valor de las facturas. Afortunadamente, luego del trabajo conjunto y serio entre los distintos actores, se expidió el decreto que mantiene la institucionalidad desde la Creg, para que a partir de estudios técnicos se sigan tomando las decisiones más pertinentes para el sector y los usuarios.
Igualmente, dijo que modificará el régimen de servicios públicos, para lo cual hemos venido aportando con los ministerios de Minas y Vivienda, la superservicios, la academia, las empresas y usuarios, las actualizaciones y los ajustes necesarios para el cierre de brechas, con rigor técnico, sin saltos al vacío, que nos lleve a revivir los apagones y la politiquería del pasado.
La forma y el tonito al anunciar los temas es importante. No sigamos graduando a los empresarios privados y mixtos como enemigos del gobierno y mucho menos de los usuarios. Al contrario, son sus mejores aliados. Todos debemos continuar trabajando: las empresas públicas, para consolidar los altos niveles de cobertura, calidad y continuidad logrados en las últimas tres décadas. Acompañaremos la propuesta de mínimos vitales financiados por las entidades territoriales y el gobierno, debidamente focalizados, sacando a los colados de las listas de subsidios.
Hoy culminamos exitosamente el 25º Congreso de Andesco, reafirmando que las empresas prestadoras y los usuarios constituyen un dúo inseparable, siendo los mejores coequiperos del gobierno para generar el bienestar general y contribuyendo con la nivelación social en los territorios.
Por esto, invitamos a la calma y trabajar unidos remando hacia el mismo lado. Recordemos que “un hombre en calma es como un árbol que da sombra. Las personas que necesitan refugio se acercan a él”.